Essaouira también era conocida por el antiguo nombre Bereber de Mogador, la ciudad de Essaouira está situada en la costa atlántica occidental, frente a las pequeñas islas Purpúreas o Mogador, azotadas por los constantes vientos del norte también llamados Alisios. Su medina o centro histórico fue listado por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad en 2001. Sus magníficas playas atraen a muchos turistas, que buscan además del sol, deportes de aventura relacionados con el viento Surf, Windsurf y South Kite
Festival de música de los Gnaoua en Essaouira:
El Festival Gnaoua y el Festival de Músicas de la Palabra de Essaouira es una fiesta innovadora en el mundo: el festival tiene como objetivo desarrollar un proyecto decididamente marroquí de autenticidad y modernidad en Marruecos. El festival de Gnaoua también lleva un mensaje universal, basado en la paz y la unión de culturas.
Playas de Essaouira:
No hay que olvidar las playas de la ciudad ancha, de arena fina con vistas a la bahía, donde podemos practicar deportes como el Windsurf, pasear en los típicos dromedarios, o navegar en una pequeña embarcación turística, rodeando la isla de Mogador.
Las islas moradas albergan una reserva ornitológica poblada de gaviotas y halcones de Eleonora, en el primer siglo los romanos instalaron una fábrica de morados, quedan las ruinas de una gran prisión de finales del siglo XIX
Al sur de la ciudad se encuentran las playas de Duiabat, Cabo Sim con grandes dunas y Sidi Kaouki junto a un bosque de Tuyas.
La Medina de Essaouira:
Si llegas en coche tendrás que aparcar en Bab Sebaa, al final del paseo marítimo, Bab Marrakech, o cerca del puerto, en la medina no puedes conducir con vehículos. La medina es una visita ineludible, de hecho, ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Blanca y azul, invita a pasear y descubrir dentro de las murallas del siglo XVIII, las puertas y ventanas talladas con delicados detalles arquitectónicos. Rodeado de murallas Situado junto al pequeño puerto, está rodeado de murallas con tres puertas principales: al norte, Bab Dukala; al este, Bab Marrakech, junto al paseo marítimo de Bab sebaa. Frente al puerto la fortaleza o Skala del puerto con dos torres defensivas. En la cara del mar, destaca la fortaleza de la Skala de la ciudad, rodeada de muros de artillería, en cuyo interior se encuentran los mejores artesanos de la madera del país.
Las calles son anchas y rectas, muy bien trazadas, como las de una ciudad europea. Si vienes del puerto, entra por la puerta de Marina, pudiendo subir a la torre de la Skala del puerto con magníficas vistas del mar y de la ciudad.
En su interior destaca la plaza Mulay el Hassan, rodeada de cafés y terrazas donde se puede disfrutar del ambiente al atardecer, la Gran Mezquita, la calle Siaguin, donde trabajan los orfebres de plata, y las plazas Bab el Sebaa y Chez Chaoni, donde se encuentra el famoso café L’Horloge, lugar de actuación de los músicos callejeros. Entre las calles destacamos la de Mohamed ben Abdala, comercial con numerosas tiendas termina en la Mellah.